Comer los alimentos frescos que trae la temporada le asegura todo el sabor y efectivas combinaciones de nutrientes. En pleno verano hay tanta variedad que le costará elegir.

En pleno verano la abundante energía solar sigue dando sus frutos. Es tiempo de movimiento, de expansión, pero también el momento en que muchos nos tomamos un descanso y nos dejamos llevar. Una buena tajada de sandía, un melocotón que se deshace en la boca, una ciruela con todo el dulzor concentrado…

La huerta nos ofrece deliciosas frutas en esta temporada con las que dejarse llevar, lo que resulta de lo más saludable. En las ensaladas, los gazpachos y las barbacoas tampoco nos faltarán hortalizas para comer variado y sentirnos ligeros a la vez que aportamos a nuestro organismo abundante fibra y los nutrientes que necesita. Al sudar más por el calor, no solo nos deshidratamos más rápidamente y aumentan nuestras necesidades de agua, sino que perdemos más minerales.

Todas esas frutas y verduras se vuelven indispensables, con su aporte de agua, oligoelementos y vitaminas. ¿Qué frutas y verduras están de temporada en agosto? Se despiden frutas que arrancaron su temporada con la primavera, como los albaricoques. Sin embargo, están casi a punto las que marcarán el fin de las vacaciones, como la uva y el higo, que maduran hacia finales de mes. Entre medio queda una larga lista de frutas y hortalizas que empezaron a madurar a principios de verano y que no solo se mantienen en temporada: el sol intensifica sus sabores y nos permite disfrutarlas en todo su esplendor. Las frutas de hueso, como melocotones, nectarinas o ciruelas, están maravillosamente dulces. Llegan ya melocotones de secano con mucho sabor, como si el sol se hubiera concentrado en ellos. Entre las ciruelas maduran las claudias, que cuando están en su punto tienen un sabor exquisito. Y todavía puede disfrutar de las cerezas, aunque serán las últimas. En jugosidad a estas frutas solo les ganan melones y sandías, que también están en su punto. Con ellos puede preparar refrescantes cremas frías, por ejemplo con melón triturado y un poquito de menta, o con sandía y las hortalizas del gazpacho. Las peras de verano son otra gran fuente de hidratación.

La pera limonera y la pera ercolina están en temporada y se deshacen en la boca. Entre las bayas, a las frambuesas y los arándanos se suman las grosellas y, más avanzado el mes, las primeras moras. Si mantiene los ojos abiertos en sus excursiones de verano, puede incluso recogerlas silvestres. Los arándanos crecen a menudo a la salida del bosque; las moras abundan en los márgenes de los caminos. En la huerta la producción de hortalizas de verano no deja de dar excedentes. Las berenjenas, los calabacines, la judía verde, los pepinos, los pimientos, los tomates… crecen de un día para otro y comban las matas pidiendo ser recogidos. En Llenyes de Gaià le ofrecemos toda la fruta y verdura de temporada a un precio muy asequible y con la garantía de que degustará un producto de gran calidad, por eso trabajamos, para ofrecerle lo mejor, ¡venga a visitarnos!.